lunes, 23 de febrero de 2015

...


Hoy es un día triste. Uno de esos tan parecido a todos en los que no estuviste. Sé que mi camino tiene como meta tu lado, pero qué difícil es seguirlo sabiendo que la realidad es sin ti. Necesito tu mano, yayo, ayúdame a seguir. Dime que sigues conmigo, sé que estás dentro mío, sé que sigues aquí. Y yo seré por ti, y seguiré por ti, y lucharé. Derribaré mi miedo a que no estés, seguiré adelante como me pediste. Es tan grande en dolor, es tan profundo el sufrimiento, es tan fácil imaginar que viajas en el viento... De pequeña prometí que mi abuelo sería lo primero, y espero haberlo hecho. Quizá pudo ser mejor, pero sabías que te quiero. Que mi amor por ti era inmenso. Sé que la mitad de lo que soy te pertenece, sigues viviendo en mi. Ausencia de ti me estremece... Y qué dolor escuchar llorar a tu mujer, que derrama lágrimas más amargas que la hiel...Pero te prometo que la cuidaré, yayo... Sólo ayúdame a ser fuerte estés donde estés...No hay día que no estés en mi mente, muero por volver a verte... Nuestra despedida fue en diciembre, y parece que el tiempo se parase en aquella habitación... el tiempo, mi vida, mi alegría... se largaron aquel día y no creo que tenga solución...ahora es todo una falsedad, una utopía, ya no soy la que era... me escudo en falsas ilusiones y alegrías, pero sé que por dentro estoy vacía...Juro que habría cambiado aquella maldita enfermedad de cuerpo, no lo habría pensado ni un momento... deberías seguir con vida, merecías volver a ver el día... y yo tu sonrisa... y darte los buenos días, y las buenas noches... y hola yayo...y adiós yayo... y abrazarte... mi segundo padre... vuelve conmigo antes de que sea tarde y sea yo quien marche... no quiero seguir en esta vida que no se merece sin ti. Qué injusto este maldito destino, que me robó lo que fue mi salvación... Ahora ya sólo queda tu recuerdo...Pero pensar todo aquello que vivimos y que no será...Y poner punto final a una historia que no debió acabar...soy hueso y carne, pero hay aire donde había alma...se fue con la tuya a un lugar mejor, donde no hay sufrimiento ni dolor. Yayo, ¿por qué no me llevaste contigo? Sé que es muy fuerte lo que digo, pero eras mi mejor amigo...Sé que nadie me querrá como tu lo has hecho...ni nadie recibirá el amor que por ti siento. Lo siento si no hice bien algunas cosas, soy consciente de ello y pondré mi empeño para poderlo rectificar. Y te prometo que intentaré que te sientas orgulloso, para cuando suba al cielo podamos conversar...y te cuente cómo logré avanzar... sé que tu me ayudarás, pero hazlo ya. Porque te juro que no sé como despegar de este infierno...Quiero avanzar pero no suelto el freno...Sería tan bonito volvernos a juntar en aquel lugar, irnos a pasear, irnos a pescar... ¿recuerdas? Como cuando era pequeña... y tú me enseñaste a caminar...por la vida, sin tropezar. Y a saber mirar al mar...ahí sigo contemplándote, porque hasta él te llora. Y aún así creo que mis lágrimas le ganan en salinidad...

Qué trágico final te aguardaba...una sombra te acechaba...y no la pudiste esquivar...y ahora sólo nos queda aceptar...



Nos vemos pronto, yayo.  

jueves, 19 de febrero de 2015

713

He visto sonrisas amargas
Y llantos llenos de alegría.
Promesas incumplidas,
negativas insatisfechas.
Testigo de palabras vacías,
Juez de miradas significativas.
He visto días oscuros,
Y noches más claras que el mediodía.
La lúgubre presencia de tu ausencia,
La más animada fiesta de tu risa.
Frías noches de invierno,
Cálidas mañanas de verano.
Besos, escenarios de la luna
Abrazos, protagonistas del sol
Y si entrelazas tu mirada con la mía
Ya no hay morada que albergue
dolor, no hay espina.
Pero que ilusión más ilusa,
Creer ser objeto de musa,
Cuando no se es más que quimera de amor.
He ahí la escasa experiencia
Que no avisa al corazón.

lunes, 8 de diciembre de 2014

Menos mal que me tengo

                    Después de tantas recaídas te das cuenta de que lo único importante es tu propia actitud frente a los problemas. Cuando tu vida se encuentra en medio de un caos existencial, donde tus problemas son sustancialmente dañinos, te percatas de lo mucho que nos quejamos en esta sociedad por superficialidades inculcadas por los estereotipos y el caso omiso que hacemos a los demás cuando sus problemas van algo más allá. Nadie se preocupa por ti porque no saben ni siquiera cómo reaccionar entregando una pequeña parte de su tiempo e interés. Son egoístas hasta para prestar ayuda. Es en los peores momentos donde te das cuenta que los amigos de verdad no existen, ya que incluso para tener un poco de apoyo has de ser tú quién, entre lágrimas, les haga un cartel luminoso donde resalte “eh, necesito un poco de ti y de tu tiempo”. No sé qué está pasándole al mundo ni a la sociedad, parece que las tecnologías y la publicidad consumista nos dan un lavado de cabeza tan profundo que nos cala hasta el cerebro y nos disuelve los valores. Pero, ¿es que tan difícil es prestar un poco de atención a un/a amigo/a?, ¿nos cuesta tanto activar la empatía y comprender que tenemos que ayudar alguna vez a quien más lo necesita para después ser nosotros ayudados cuando lo necesitemos? Las personas que sí reaccionan ante problemas ajenos acaban por aborrecer la falta de interés cuando esta ayuda no es recíproca. Y es aquí donde debemos darnos cuenta de que si no nos queremos, ni somos independientes, ni tenemos fuerza interior, acabamos perdidos, hundidos en nuestras miserias ya que somos los únicos en verdaderamente poder hacer frente de las adversidades. Las únicas personas que puede ser que te ofrezcan una ayuda sincera serán los miembros de tu familia, y a veces, por desgracia, ni siquiera ellos. En fin, siento que cuando tus supuestos amigos te ven llorar incluso llegan a sentir una chispa de llamémosle auto-satisfacción. Se sienten satisfechos de no estar ellos en tu pellejo y de no ser ellos los que lloran en ese instante. Somos egoístas hasta para ser empáticos y secar las lágrimas del prójimo. Suerte que yo no soy así. Suerte que yo soy yo y me tengo a mí.

viernes, 10 de octubre de 2014

No Por Mucho Rogar Aparece Más Temprano


           A veces nos pensamos que la vida nos dice “no” cuando sólo nos dice “espera”. Digo esto porque, ¿cuántas veces habremos querido desistir en la búsqueda y el esfuerzo sobre algo?... Parece que el ser humano está predestinado a rendirse mucho antes de alcanzar sus metas. Sin embargo, hay veces que la vida nos enseña su intrigante sonrisa cuando menos lo esperamos, y es en ese momento cuando empezamos a creer.

        Es posible que muchas veces hayamos idealizado nuestro objetivo y hayamos pensado que nuestras expectativas a penas rozan lo realista. Solemos pensar que exigimos demasiado para lo que la vida nos puede dar, y que es mejor conformarse con menos para no resultar decepcionado.  Pero yo pienso que es hora de empezar a creer que si exigimos algo y realmente nos lo merecemos , la vida nos lo concederá tarde o temprano. 


jueves, 7 de noviembre de 2013

Intentontos


No intentemos negar lo evidente. No debemos dejemos influenciar por el criterio sapiencial que muchas veces se nos plantea como una evidencia universal. Dejemos claro que los polos opuestos no se atraen. Cuando dos personas no encajan está claro que será muy difícil que puedan llegar a entenderse por completo. Muchos pensarán que es normal que las parejas no se estén en mutuo acuerdo en algunos aspectos y que ésto es lo realmente excitante de una relación, que es en esta confrontación de ideas donde se demuestra hasta qué punto se está dispuesto a aceptar a la otra persona y a profundizar en mantener una relación de dispares. No podemos juntar periquitos con ninfas por muy aves que sean ambas. Además, las personas se agrupan en igualdades ideológicas y de comportamientos tanto desde un punto de vista más global, como sería el caso de los continentes y sus respectivas culturas, como desde un punto de vista más local, como serían los partidos políticos, creencias religiosas, etc. Es bien cierto que dos personas pueden diferir en alguno de estos puntos y que aún así sea posible llevar a cabo una convivencia juntos, pero algo que bajo mi punto de vista no puede ser viable, sería el desnivel de la respectiva capacidad racional  y crítica de ambos integrantes. Y esto deriva en que no compartirán las mismas ideas ni verán el mundo desde un mismo ángulo. Lo que a uno le parezca mal, al otro le parecerá bien, lo cual supone un importante problema ya que se crearán numerosas disputas entre ambos con muy poca capacidad de resolución dado que cada uno pensará cosas totalmente distintas y será muy difícil cambiar su opinión. Es por eso, que muchas personas en un principio comienzan una relación dejando de lado las diferencias, porque las consideran normales entre dos personas, y se centran en otros asuntos mas superfluos  Por consiguiente, está claro que no siempre hay que fijarse en lo superficial, aunque no por ello menos importante, de la relación sino ver también cuán compatibles son el uno con el otro y si se está de acuerdo en las formas de actuar y de mantener una relación y de no ser así, aludiré a mi criterio sapiencial: cada oveja con su pareja.

domingo, 29 de enero de 2012

Hoy puede ser un gran día

No sé lo que me hizo mirar a través de la ventana del tren aquella mañana de sábado. Quizás algo me llamó la atención al verlo a través del rabillo del ojo o tal vez fue pura coincidencia, pero, al mirar hacia la derecha pude leer a través del cristal una frase escrita en aquel muro que decía ‘’Hoy puede ser un gran día’’. Y no sé por qué motivo ni por qué causa aquella frase me hizo reflexionar. Nunca me había parado a pensar en lo que aquello podía significar, pero ciertamente me alegré de que hubiese gente que te anime el día sólo con escribir una frase en un muro, sin saber siquiera el motivo de aquella pintura. Puede ser que la persona que escribió eso simplemente lo hizo por pura diversión o quién sabe qué. Iría bebido tal vez. O quizás no. Quizás simplemente lo hizo para que aquella frase absorbiese los pensamientos de personas como yo en el corto trayecto del tren. Y tal vez, y por pura coincidencia, esa frase pudiese ser cierta, que te hiciera abrir los ojos y ver que aquel podía ser un gran día, fijándote un poco más allá de las cosas inolvidables, centrándote principalmente en los pequeños detalles del día a día. Yo pensé que sí, que aquel día podía ser un gran día y no porque me hubiese tocado la lotería ni porque hubiera ganado un viaje a las Vegas, sino, porque aquel día estaba viva, estaba cerca de mi familia, estaba disfrutando de mi adolescencia, llena de vida y con ganas de aprender, de crecer, de ser alguien en un futuro y de tener siempre a mi familia y amigos cerca, de saber que no estoy sola, que puedo confiar en gente y de saber que si miro al lado siempre habrá alguien que querrá escuchar mis problemas y me dará la mano para ayudarme. Aquel y muchos más días pueden ser un gran día si lo miro de otro modo, porque a pesar de los problemas que resté en aquel momento, fue un gran día.

N



lunes, 7 de noviembre de 2011

Formo parte del gran porcentaje de personas que no saben quiénes son, es decir, que no se conocen a sí mismo. Si algún día por alguna casualidad repentina de la vida nos conocemos, no me preguntes ''¿quién eres?'' porque no podré contestarte a esa pregunta, ya que ni yo misma sé quién soy.
¿Personalidad? En estos tiempos hace un largo rato de falta. Pero ya no es cuestión de personalidad, es un cóctel de ignorancia mezclada con miedo y dudas. No sé quién soy, ni qué quiero para mi, que futuro, que hacer, que elegir, que desear... Es un túnel sin salida. La vida misma es un túnel sin salida, hasta que no te encuentras estás perdido. Pero, ¿qué remedios pones a ésto? Nada. Simplemente nos quedamos en la nada lamentándonos, dejándonos ir por el rebaño siguiéndolo como una desdichada cabra perdida y loca que no sabe ni quién es. Hay que avispar la mente, experimentar, caer y levantarse, errar como buenamente dicho es algo humano pero nos asusta este hecho, el qué dirán y pensarán es algo que no tiene que importarte. Lánzate y descubre quién eres y cómo te gustaría que te recordase la gente cuando ya no estés aquí. Busca tu inspiración.




N

miércoles, 15 de junio de 2011

You

Que sí, que lo sé, soy una niña de casi 15 años sin saber qué es la vida. Que no puedo tomar decisiones por mi misma porque en un 80% de esas decisiones me equivocaré. Que aún no puedo pensar en el amor de mi vida porque ese amor no será amor, sino capricho. Pero te puedo asegurar, que me equivoque o no en esta decisión no tengo nada que perder al quererte, ni tengo nada que perder al pensar que esto puede durar mucho y que puedes llegar a ser la persona que vea amanecer todas las mañanas.



N

domingo, 29 de mayo de 2011

Sabía saber no reconocerlo.

Diez bonitos vestidos asomando por su armario
Los miraba con desdicha
al pensar que en otro cuerpo harian mas provecho.

Odiaba que el espejo la contemplase.
Odiaba recorrer con sus ojos el perfil de sus curvas.

Llovía en su cara en la avenida 54.
Inundando mañanas y noches con sus lágrimas.
Invocando al cambio de ánimo. Uno tras otro.
Se dio cuenta que no podía más, 5 años luchando en su interior.
Una lucha entre su espejo y su cuerpo.
Las horas perdidas ahogando llantos y maldiciones,
Que convertían su vida en una cárcel de verdades.
Decían que mentiras. Pero sabía cómo no reconocerlo.

A tres pasos del baño y a dos de sus dedos,
Pero la impotencia interrumpía acto seguido
En el escenario del dolor
Rodando una película de angustias
De la que ni ella sabía como despedirse.


N